CDL Madrid

Comparte:

Luis E. Íñigo: «La Historia casi nunca hace justicia a los vencidos»

El salón de actos del Colegio Oficial de Filosofia y Letras y en Ciencias de Madrid, fue escenario, el pasado 7 de marzo, de la presentación de una novedad editorial. En este caso, con un acto muy especial ya que el autor del libro es el flamante secretario general del Colegio, el inspector Luis E. Íñigo, que estuvo acompañado de su editora, Esperanza Moreno, y del nuevo decano del Colegio , Amador Sanchez.

Un autor de reconocido prestigio

El acto comenzó con las palabras introductorias a la figura de Luis E. Íñigo, por parte del decano del Colegio: “Presento con orgullo a un brillante historiador, autor de numerosos artículos de investigación y de varios libros; a un profesor de enseñanza secundaria  de amplia experiencia; y a un inspector que ha desempeñado importantes cargos en la administración educativa. Pero, sobre todo, presento con orgullo a mi nuevo secretario general, al que agradezco el haberse decidido a formar parte de esta nueva Junta de Gobierno del Colegio, cuyo trabajo solo tiene sentido si está al servicio de cada uno de los colegiados”.

La editora del libro, Esperanza Moreno, destacó algunos valores de la obra, los que hicieron que una prestigiosa editorial como EDAF la editara: “Desde el principio, nos dimos cuenta de que estábamos ante un gran trabajo, un libro con un hilo conductor perfecto, en el que se mezcla la amplia cultura clásica y los conocimientos del autor, con las ganas de llegar con amabilidad al lector, de entrar en conexión directa con él en cada párrafo. Además, he de decir que como correctora de estilo, he tenido poco trabajo, porque Luis, además de tener una vasta cultura, escribe muy bien y escribe para todos, con claridad y emoción”.  Y quiso aportar una última reflexión: “Al leerlo por primera vez encontré un paralelismo con la obra Momentos estelares de la Humanidad, de Estefan Zweig.  Creo que Vae Victis formará parte de ese elegido paquete de libros imprescindibles para quienes queremos conocer la historia desde una perspectiva objetiva, y sobre todo, más justa para todos, vencedores y vencidos”.

20 batallas y otros tantos descubrimientos

De lo que se trata con este libro es de hacer justicia a los vencidos, de contar algunas cosas que no se han contado; porque nos interesa la verdad como amantes de la Historia: sólo puede amarse lo que se conoce bien”. Las palabras de Luis E. Íñigo definen con claridad el objetivo de un libro que recoge algunas de las grandes batallas que han marcado el devenir de la Humanidad, que “nos han llevado a asumir y respetar determinados valores como la libertad y la democracia, frente a otros donde el individuo quedaría fuera de juego”.

Son veinte las elegidas. El libro comienza con la derrota de los persas en la Batalla de Maratón   y culmina con la derrota soviética en la Guerra Fría. De todas ellas, ocho,  protagonizadas por España o la génesis de lo que sería España con los siglos: La derrota de los visigodos en la Batalla de Guadalete; la derrota  española en Santiago de Cuba, o la del frente republicano en la Batalla del Ebro. Y algún que otro triunfo, como la derrota del Imperio Otomano en Lepanto.

En cada uno de los capítulos, con la singular maestría de un autor profundamente vinculado a la docencia, conocemos un poco más “el hecho histórico, desmontando mitos aprovechados -casi siempre sin criterio histórico- por la gran pantalla. Por ejemplo sobre la Batalla de Maratón, acaecida en el año 490 a.C,  que sirvió al autor para explicar los vericuetos y la estructura de su obra: “ A través del cine conocemos a los ejércitos persa y ateniense, pero lo hacemos de forma desvirtuada. Ni mucho menos los griegos -que aún no habían llegado a su esplendor- tenían un ejército sofisticado, porque estaban divididos en pequeñas Ciudades Estado;  y tampoco los persas eran unos bárbaros, como se nos ha contado”.

El libro se cierra con un capítulo dedicado a la caída del Muro de Berlín, que su autor elige por varias razones: “Lo que ocurrió el 9 de noviembre de 1989 supone ganar otro tipo de batalla, superar a un periodo histórico protagonizado por la Guerra Fría; un enfrentamiento entre dos grandes potencias, en el que se usaron como armas estratégicas la propaganda, la diplomacia y el miedo de los ciudadanos”.

Pero no hay que olvidar que Vae Victis no es, ni mucho menos, un elogio a la guerra, sino todo lo contrario, porque para su autor “la guerra es el peor invento del ser humano”.